Si te pasa algo de esto, la L-Glutamina es para vos:
Tenés el intestino inflamado, con molestias, gases o diarreas constantes.
Sufrís de colitis, gastritis o intestino permeable y ya no sabés qué comer.
Te sentís débil, sin energía y con una recuperación lenta después del ejercicio.
Tenés antojos constantes por azúcar o carbohidratos.
Estás en un proceso de pérdida de peso, pero tu digestión te sabotea.
Sufrís de fatiga crónica o síndrome de intestino irritable.
Estás en tratamiento médico y querés proteger tu mucosa intestinal.
Has pasado por estrés prolongado, burnout o infecciones intestinales.
Tenés baja masa muscular o estás buscando mantenerla en procesos de cambio.
La L-Glutamina te ayuda a:
Regenerar la mucosa intestinal y mejorar la salud digestiva.
Disminuir la inflamación del intestino y aliviar molestias como gases o diarreas.
Fortalecer el sistema inmune desde el intestino (¡el 70% vive ahí!).
Recuperarte más rápido del ejercicio físico y conservar masa muscular.
Reducir antojos de azúcar y estabilizar tus niveles de energía.
Apoyar procesos de desintoxicación intestinal de forma segura.
Acompañar protocolos de pérdida de peso, mejorando la absorción de nutrientes.
Proteger tu cuerpo durante tratamientos médicos intensos.
Sentirte más liviana, con menos inflamación y con el cuerpo en equilibrio.

